
Sugestiones londinenses, pragmatismo flamenco, rasgos italianos y amor por la estética. Las camas Molteni&C hablan muchos idiomas – los de los diseñadores de fama internacional que las han soñado y concebido –, sin embargo, sin contar las diferencias, comparten algunos aspectos fundamentales: la utilización de materiales exclusivos, las tecnologías siempre de vanguardia y esa pizca de genio capaz de generar algo realmente nuevo. Como Honey, del israelí Arik Levy, desde hace tiempo presente en las galerías de todo el mundo y ahora también en los dormitorios, gracias a una creación que aúna líneas modernas y tecnologías innovadoras, entre otras, el contenedor bajo el somier basculante, estudiado para facilitar el acceso al módulo, o Nick, del veneciano Luca Nichetto, que sorprende por el equilibrio de sus líneas, los elementos estructurales en metal cromado y la forma con la que las costuras en contraste replantean sus proporciones. Siempre de Israel llega Sweetdreams, diseñada por Ron Gilad: un somier centrado principalmente en el bienestar y el descanso gracias a la lograda sinergia con el cabezal relleno, a colgar en la pared y enmarcado por un perfil de madera. El cabezal desempeña un papel destacado también en Fulham, cama cuyo diseño se inspira en la homónima calle londinense: diseñada por Rodolfo Dordoni, se caracteriza por el cabezal envolvente y el banco, que es su complemento imprescindible. Dordoni también ha firmado Wish, una obra refinada y minimalista, hecha de roble, olmo y suma atención por los detalles; del director creativo de Molteni&C, Vincent Van Duysen, nos llegan dos camas. La primera es Anton, que representa el triunfo de lo esencial sobre lo superfluo, diseñada tras un estudio meticuloso de líneas y materiales; la segunda es Ribbon, una cama textil suave y fresca, adecuada para una clientela exigente que apreciará el revestimiento enganchado en la cinta que recorre completamente el perímetro del cabezal y la cama, y que a la función estética añade un importante cometido estructural. Podría ser bastante, pero no lo es. En la gama de camas de diseño Molteni&C hay espacio también para High-Wave, realizada por el genial diseñador Hannes Wettstein: un objeto ergonómico, cómodo e increíblemente funcional, también gracias a tecnologías como el mecanismo móvil de dos posiciones, que permite lograr excelentes posiciones de lectura. Una búsqueda de practicidad asumida también por Nicola Gallizia, que con su Oz ha transformado el concepto de “sofá-cama” mediante un sistema capaz de sacar un tablero de 200 cm haciendo desaparecer al mismo tiempo los brazos bajo la estructura. Y finalmente, el amor por el diseño refinado de los diseñadores Molteni&C también lo comparte la talentosa Patricia Urquiola, que con Clip diseña un objeto sinuoso y original, mediante formas recogidas y revestimientos desenfundables que aportan a esta cama moderna un lookpreciado y siempre emocionante.